Noticia Destacada

U. de Cambridge destaca recuperación del huemul en Patagonia chilena

Published

on

Estudio de cinco años en Parque Nacional Bernardo O’Higgins muestra que población se duplicó.

En 1990, expertos identificaron 22 ejemplares de huemules en el Parque Nacional Bernardo O’Higgins, ubicado en el límite de las regiones de Aysén y Magallanes. Incluso, una de las zonas del avistamiento fue bautizada Valle Huemules. Pero cinco años más tarde, sólo se visualizaron seis. La introducción ilegal de ganado y la caza furtiva ahuyentaron a una especie que en 2003 ingresó a la categoría de peligro de extinción, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y que en los últimos 100 años ha perdido el 99% de su población.

En 2002, la Wildlife Conservation Society (WCS) y Conaf, financiados por el Centro de Aclimatación Zoológica de La Dehesa (CAZ), crearon un plan de acción para recuperar su población.

Tras un estudio de cinco años, la U. de Cambridge (Gran Bretaña) concluyó que el mencionado plan de acción logró duplicar la población del animal entre 2004 y 2008, pasando de 38 ejemplares a 77.

El médico veterinario chileno del Departamento de Arqueología y Antropología de la U. de Cambridge, Cristóbal Briceño, y coautor del estudio, sostiene que el éxito del plan se debe a que se eliminó el ganado ilegal y estableció dos estaciones de guardabosques para evitar la cacería furtiva.

Briceño dice a La Tercera, que a partir de 2004, se restableció la abundancia original de la especie antes de la introducción del vacuno. “Y aunque parecen números reducidos, el huemul vive en muy bajas densidades, de hecho, este parque presenta las densidades más altas descritas para la especie”, señala.

Según Briceño, la eliminación del ganado es fundamental, pues reduce los pastizales, alimento esencial del huemul. Además, se trata de un animal muy tímido, que deja su ecosistema cuando siente que algo no anda bien.

Alianza pionera

El estudio, indica Briceño, es esperanzador y un ejemplo para otras iniciativas. “Los parques nacionales son la base de la conservación moderna, pero tiene que haber una inversión en la gestión y la protección sobre el terreno. No se puede tener un ‘parque de papel’, donde un área es delimitada en el mapa, pero ignorada físicamente”, asegura. “Las colaboraciones público-privadas son esenciales para que las acciones de conservación sean exitosas”.

De hecho, Fiorella Repetto, asistente de dirección de WCS Chile, dice que es un proyecto pionero, pues nunca se había invertido tanto dinero en un proyecto público privado de estas características. “Nunca se había hecho una cooperación tan grande por una especie”.

Para el proyecto se invirtieron más de 600 mil dólares en las dos estaciones de monitoreo y la contratación de guardaparques.

Además, agrega Repetto, está pendiente un aporte directo a las especies en peligro de extinción a través del Ministerio del Medio Ambiente para conservar el huemul.

Fuente:latercera.com

Leave a Reply

Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Trending

Salir de la versión móvil